Para las personas que buscan aplicar la filosofía Montessori en casa, y poner una camita baja en el suelo hace que muchas preguntas surjan de cómo se debe hacer. El asunto de dormir es todo un tema, cada bebé y cada familia son muy diferentes. Considero que cada familia debe saber que es lo que busca para sus hijos, y de ahí seguir su instinto o seguir lo que el corazón les dice. Muchas veces todo suena súper fácil, lo ponemos en práctica y no es como nos decían. Así que les voy a contar la teoría sobre la cama Montessori así como mi experiencia con mi hijo. Hasta el momento nos ha ido excelente y a él le encanta su cuarto.
Primeramente tenemos que preparar el ambiente para poder colocar una camita. Tenemos que asegurarnos que si vamos a poner una cama en el suelo, entonces tenemos que hacer todo un cuarto que sea adaptado al niño y dónde la seguridad será lo primero. ¿Por qué la seguridad? Porque el niño tendrá la libertad de salir de su cama y estar alrededor de su cuarto. Entonces, ¿en qué vamos a pensar cuando decimos seguridad?:
1. Todo lo que voy a meter en el cuarto es para el niño.
2. Todo lo hay en el cuarto él puede usarlo y no hay peligro.
3. Muebles pesados y/o empotrados.
4. Tapar todos los enchufes.
5. Estantes con juguetes al alcance del niño.
RAZONES
Con la cama queremos que el niño pueda subir y bajar cuando quiera dormir o cuando quiera levantarse. Queremos evitar todos los accidentes que ocurren cada año con las cunas por los barrotes y por las caídas. La cama permite que el niño no tenga accidentes. Le da al niño libertad, visión y estimula los movimientos del cuerpo. Al tener al bebé en una cuna les limitamos su espacio, les limitamos sus movimientos, sus decisiones y les invita explorar el cómo hacer para salir de ella. La cama promueve la independencia de poder escoger cuando salirse, la libertad de poder moverse y la posibilidad de poder ver claramente a su alrededor. El niño puede levantarse de su cama e ir a buscar a sus padres cuando quiera. No hace falta tener que llorar para que lo vayan a buscar o esperar a que el adulto llegue. Estos movimiento que el niños es capaz de realizar en su cama, apoyan a que desarrolle una actitud psicológica activa y le permite al niño resolver sus problemas de forma empoderada.
PROPÓSITOS
1. Darle al niño orden y orientación del ambiente de su alrededor.
2. Ofrecer una vista sin obstrucciones para el sentido visual de los bebés.
3. Asistir en el movimiento independiente.
4. Proporcionar al bebé el lugar más adecuado para dormir y descansar.
EDAD
El bebé puede dormir en su cuarto desde los 3 meses. Sin embargo, esta es una decisión muy personal y de pareja. Pero es importante saber que desde que tiene 3 meses ya el bebé puede dormir en su camita. Si vamos a pasarlo más grande es importante que primero haga las siestas en la camita para que se vaya acostumbrando a su espacio o que haga parte de la noche ahí. Así en el momento de la transición todo es más fácil.
Mi experiencia: A mi hijo lo pasamos a los 9 meses y medio. Los primeros meses lloraba o se levantaba y se quedaba sentado, yo iba y me acotaba con él y rápidamente se quedaba nuevamente dormido. Como al año y 3 meses se comenzó a pasar a nuestro cuarto. El duerme en su cama desde que se duerme aproximadamente 7:30 – 8pm y se levanta a las 4am, ahí el se queda un ratito sentado viendo el cuarto (yo lo veo por el monitor) y luego camina a nuestro cuarto. Se queda con nosotros hasta las 6am que nos levantamos todos. Verdaderamente es una delicia, amamos cuando llega y ese ratito que se queda acurrucado con nosotros. ¡Tenemos que aprovechar todas las etapas de nuestros hijos y disfrutarlos!
TAMAÑO
El tamaño del colchón que vamos a escoger puede variar dependiendo del espacio del cuarto. Sin embargo, se recomienda uno tamaño twin (colchón individual). Con una altura de 10cm. Esta altura es mínima y si el niño rueda no hay ningún peligro. Y además es un grosor suficientemente seguro para ser un colchón firme y estable para dormir. Nosotros usamos el colchón twin y nos ha funcionado perfecto. Es un tamaño grande proporcionalmente a él, pero ya es el colchón que tendrá por varios años. Además es súper cómodo para acostarse ahí con el él a ver un libro o dormirlo.
El colchón puede estar en el suelo sin ningún respaldar o marco. Lo importante es que el niño pueda entrar y salir cuando quiera, y que no haya nada que lo pueda golpear. Yo tengo el colchón directamente en el suelo y lo que tengo un marco forrado en cuero en forma de “L” para protegerlo de las paredes.
CON BARANDA O SIN BARANDA
Se puede poner una baranda pequeña en un espacio aproximadamente de la mitad del largo de la cama. De esta manera no rodará tan fácilmente al suelo pero siempre podrá salir y entrar por su propia cuenta.
¿CAEN EN EL SUELO?
Sí, si se mueven mucho pueden rodar al piso. ¿Pasa algo? Nada. Muchas familias optan por poner una alfombra por si rueda que caiga sobre ella. Otras ponen la baranda y otras almohadas. Nosotros usamos una baranda al principio, me duró como un mes y lo dejé solo con la alfombra.
¿QUE HAGO SI SE CAE EN EL SUELO?
Esto es muy personal. Muchas familias van directamente y lo vuelven a poner en la cama, otras lo dejan ahí y a otros no se salen de la cama. Mi hijo se mueve mucho, pero nunca se ha salido de la camita. Se mueve como trompo entonces a veces amanece con las piernas en la almohada, pero nunca se ha salido. Y si se sale esta en una alfombra suave así que no habría problema.
“One of the greatest helps that could be given to the psychological development of a child would be to give him a bed suited to his needs and cease making him sleep longer than necessary.” – Maria Montessori